Hace pocos días (14 de febrero) celebrábamos San Valentín. Se trata de una festividad de origen cristiano que conmemora las buenas obras realizadas por San Valentín de Roma, relacionadas con el concepto universal de amor y felicidad. En muchos países se celebra esta conmemoración, pero siempre ligada al concepto de amor a nivel de pareja, a nivel de personas que están enamoradas.
En el ámbito profesional desconozco si existe alguna celebración parecida. Y me sorprende, pues el amor es un arma poderosísima en el ámbito empresarial y profesional. A mi entender, existen 3 amores imprescindibles para tener éxito en tu actividad profesional. Estos son:
- Amor a tus clientes: es quizá la primera gran decisión que debes tomar en tu estrategia profesional. ¿Con qué tipo de clientes quieres trabajar? ¿Cuál es el nicho de mercado al que te quieres dirigir? Los clientes son soberanos y eligen a la empresa que prefieren. En la mayoría de los mercados existen un gran número de empresas que compiten y, querer a los clientes y conseguir que estén plenamente satisfechos con nuestro producto y/o servicio resulta imprescindible. Por lo tanto, piensa bien con qué tipo de clientes quieres trabajar. Si no los amas, será difícil que compitas con éxito. Porque como decía Michael Leboeuf, escritor y profesor norteamericano especialista en management, “un cliente satisfecho es siempre la mejor estrategia de todas”. Así que, o amas profundamente a tus clientes, o vas a tener dificultades.
- Amor a tus trabajadores y colaboradores: amar a tu equipo de trabajo también es un requisito imprescindible para tener éxito a nivel profesional. A mi modo de ver, es quizás algo más importante que amar a tus clientes. Contar con el personal adecuado, cuidarles y motivarles para que puedan dar lo mejor de sí mismos, será imprescindible para tener un proyecto profesional realmente exitoso. Como dice el conocido empresario Richard Branson, “los clientes no son lo primero. Lo primero son tus trabajadores. Si cuidas bien a tus trabajadores, ellos cuidarán de tus clientes; así de simple”. Y cuando hablamos de cuidar a tus trabajadores y colaboradores, también me refiero a formarles y a ayudarles a que crezcan profesionalmente. En este sentido vuelvo a citar a Branson con otra frase que me encanta “Forma bien a tus trabajadores para que puedan irse; trátalos suficientemente bien para que no quieran hacerlo”. En definitiva, si no eres capaz de amar a tus trabajadores será muy difícil que tengas éxito en tu actividad profesional. Así que dedica tiempo a pensar y a decidir con qué trabajadores quieres colaborar… y con cuáles no.
- Amor al trabajo que realizas: el último amor del ámbito profesional y para mí, el más importante. Amar el trabajo que realizas. Sólo dedicándote a una actividad profesional que realmente amas, podrás conseguir un gran rendimiento profesional. Resulta francamente difícil ofrecer un alto nivel de desempeño en una actividad que no te gusta. Es más, quizás puedas cumplir adecuadamente en actividades que no te apasionan, pero sólo ofrecerás un rendimiento excelente si realmente amas el trabajo que haces. Así que quieres ir tirando, trabaja de lo que puedas. Pero si realmente quieres dejar huella y conseguir un gran rendimiento, busca una actividad que realmente ames. No sólo conseguirás grandes resultados, sino que además serás realmente feliz en el ejercicio de tu actividad profesional. Como decía Confucio “encuentra un trabajo que te apasione y no tendrás que trabajar ni un día en tu vida”.
Así que ya sabes, si realmente quieres tener éxito y ser feliz en tu actividad profesional, debes amar a tus clientes, amar a tus empleados y colaboradores y sobre todo, amar el trabajo que realizas.
¡Feliz San Valentín!
Fuente de la imagen https://comoenamorarle.com/