Céntrate en lo que depende de ti

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¿Sabes ya qué objetivos te marcarás para este año que empieza? Sean personales o profesionales, individuales o colectivos, lo más importante es que dependan de ti. En este post te explico por qué.
Céntrate en lo que depende de ti

En primer lugar, quería enviarte mis mejores deseos para el año que justo acaba de empezar. Y en este inicio de año, es cuando muchas personas se fijan objetivos, tanto a nivel personal como profesional y tanto a nivel individual como colectivo. En este sentido, quería empezar el año con este post, para aconsejarte que, en la fijación de objetivos, apuestes por aquello que depende de ti. Espero te sea útil y tengas esta idea bien presente para fijar tus objetivos. En la vida, es fundamental aprender a distinguir entre lo que está bajo tu control y lo que no.

  1. Piensa en qué ámbito quieres mejorar. Define qué quieres mejorar, tanto en tu vida personal como profesional. En lugar de fijar objetivos concretos, piensa los ámbitos concretos en los que en el año que empieza, quieres experimentar mejores resultados.
  2. Piensa en lo que depende de ti. Para conseguir mejores resultados en el ámbito que te hayas propuesto, el primer paso es identificar claramente qué aspectos dependen exclusivamente de ti. Esto puede incluir tus acciones, tus reacciones, y tu actitud. Reflexiona sobre lo que puedes hacer para influir positivamente en tu entorno y en tus objetivos.
  3. Céntrate en ello. Una vez que hayas identificado lo que depende de ti, enfócate en esas áreas. Dedica tu energía y recursos a mejorar y controlar esos aspectos. Esto te permitirá avanzar de manera más efectiva y sentirte más empoderado.
  4. Ignora lo que no depende de ti. Es crucial aprender a soltar lo que está fuera de tu control. Preocuparse por estos aspectos solo genera estrés y distracción. Enfócate en lo que puedes cambiar y deja de lado lo que no puedes influir, aquello que está fuera de tu control. Existen cantidad de elementos que no podemos controlar. Pero afortunadamente también existen muchos otros que están bajo nuestro control.

Un ejemplo de esta actitud puede ser Rafa Nadal, conocido por su mentalidad fuerte y su capacidad para concentrarse en cada punto. Nadal se enfocaba en su juego y en su estrategia, ignorando factores externos como el comportamiento del público o las condiciones climáticas. Cuenta su tío y entrenador, Toni Nadal, que cuando era un niño jugaba un campeonato y se le rompió la raqueta. Rafa, acostumbrado a no quejarse a sólo fijarse en aquello que podía controlar (su esfuerzo, su disciplina o su concentración) continuó jugando como si nada. Un rato después, cuando llegó su tío se dio cuenta de que jugaba con la raqueta rota y le dijo que la cambiara, a lo que Rafa accedió comentándole que él le había enseñado a no quejarse y a concentrarse sólo en aquello que dependía de él. Sirva esta curiosa anécdota para recordar la idea central del post: PIENSA SÓLO EN AQUELLO QUE PUEDES CONTROLAR Y VE A POR ELLO.

Piensa en fijar tus objetivos teniendo en cuenta esta idea central. Siguiendo el símil del deporte, por ejemplo, en lugar de fijarte como objetivo ganar tantos partidos o tantos torneos (no depende sólo de ti, pues tienes rivales, lesiones, arbitrajes, azar u otras cosas que no puedes controlar), fíjate objetivos que sólo dependan de ti. Cuantos días vas a entrenar, con qué intensidad o con qué actitud. Si quieres perder peso, hay variables que no dependen de ti (tu metabolismo, por ejemplo). Sin obsesionarte por los resultados finales, fija tus objetivos en lo que puedes controlar y olvida el resto. Seguro que, si te centras en lo que debes hacer y olvidas el resto, los resultados llegarán y serán sostenibles en el tiempo.

Y esta filosofía la puedes aplicar también en el mundo profesional y empresarial o en tu vida personal. Verifica que todos tus objetivos están enfocados en aquello que sólo depende de ti.

Termino con una conocida frase de Mahatma Gandhi:  

«La satisfacción está en el esfuerzo, no en el logro. El esfuerzo pleno es la victoria plena.»

Esta frase nos recuerda que el verdadero éxito no siempre se mide por los resultados externos, sino por el esfuerzo y la dedicación que ponemos en nuestras acciones. Al enfocarte en lo que depende de ti y dar tu máximo esfuerzo, ya estás logrando una victoria significativa.

¡Que tengas un muy feliz y productivo 2025!

Xavi Roca

Soy Talentista, ayudo a organizaciones, directivos y profesionales a conseguir un alto rendimiento a través de potenciar su liderazgo y marca personal. Me apasiona el liderazgo, la gestión de equipos de alto rendimiento y la Marca Personal, y he dedicado mi carrera profesional a ayudar a empresas y profesionales a desarrollar y potenciar su talento y fortalezas para conseguir su máximo desarrollo y rendimiento.

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