Recientemente he leído el libro «Choose Yourself» de James Altucher. Es un libro divertido, provocador e inspirador. Altucher comparte ideas y experiencias personales (grandes éxitos y grandes fracasos) para ayudarte a alcanzar el éxito interior (felicidad y salud personal) y el éxito exterior (trabajo satisfactorio y salud).
Una de las ideas que más me sorprendió fue lo que Altucher denomina como “Los 7 hábitos de las personas mediocres altamente efectivas”. Él mismo se considera mediocre. Cree que no todo el mundo puede ser una estrella, un crack de clase mundial en su actividad. En sus propias palabras, considera que “intentar alcanzar la grandeza es el camino más rápido al fracaso”. Y no puedo estar más de acuerdo. Hay miles de libros de autoayuda que prometen alcanzar la grandeza… pero, en mi humilde opinión, solo unas pocas personas pueden llegar a lo más alto en su disciplina profesional. Por lo tanto, el resto de nosotros solo podemos aspirar a convertirnos en “profesionales mediocres de éxito”. Si sabes que no vas a ser de clase mundial en tu actividad pero quieres ser feliz llevando una vida exitosa y mediocre, Altucher te ofrece las siguientes recomendaciones.
- Procastinación. Según Altucher, “la procrastinación es que tu cuerpo te dice que debes retroceder un poco y pensar más en lo que estás haciendo”. También recomienda averiguar por qué procrastinas. A veces, la procastinación puede ser una señal de que eres un perfeccionista, de que no disfrutas lo que estás haciendo … Escucha a tu cuerpo, está tratando de decirte algo.
- Cero tareas. Altucher explica que «existe un mito común que afirma que las personas excelentes pueden realizar múltiples tareas de manera eficiente«. Probablemente algunas personas importantes puedan realizar múltiples tareas, pero la mayoría de nosotros no podemos. Por lo tanto, es mucho mejor realizar una sola tarea. Y Altucher también recomienda cero tareas. No hacer nada y tener tiempo libre con bastante frecuencia.
- Fracasa. La mayoría de las personas mediocres fracasarán a menudo. No siempre fracasan, pero sí a menudo. La idea importante es no repetir los mismos errores. Y aprender a lidiar con la psicología del fracaso. “Sigue fallando hasta que accidentalmente ya no falles”.
- No original. La mayoría de nosotros, por lo general, no tenemos ideas originales. A veces, la mejor opción para los profesionales mediocres es no intentar ser originales, sino seguir ideas antiguas, copiar las buenas, transformarlas, combinarlas… No te obsesiones con la originalidad. Para la mayoría de los profesionales, es un lujo que está fuera de nuestro alcance.
- Poco networking. Algunos profesionales mediocres dedican mucho tiempo a hacer networking en lugar de trabajar y dirigir el negocio. No todo el mundo tiene las mismas habilidades para establecer contactos con éxito y, algunos de ellos, se relacionan demasiado y evitan otras responsabilidades importantes para potenciar su negocio.
- Haz lo que sea para obtener un «sí». Obtener un «sí» es una de las acciones más importantes de un profesional. La capacidad de vender y negociar será muy importante para tu éxito y felicidad. Y al final, es (en parte) un juego de números. Así que sigue intentando buscar el «sí».
- No juzgues rápidamente a las personas. Algunas personas dicen que tienen un instinto especial para formarse juicios correctos sobre las personas en unos pocos segundos. Quizás algunas personas realmente brillantes puedan tener esta habilidad. Pero la mayoría de la gente mediocre no la tiene. Así que asegúrate de no confiar específicamente en tus primeros instintos. La mayoría de las veces puedes equivocarte y este error puede llevarte a tomar decisiones equivocadas.
La mayoría de la gente piensa que ser mediocre es malo. La gente suele sobrevalorarse a sí mismo. Por lo tanto, «no permitas que la sobrevaloración se interponga en el camino de la felicidad y el éxito». Así que te recomiendo encarecidamente que aceptes tu mediocridad (yo lo hice hace muchos años) como una forma de potenciar tu liderazgo y tu marca personal. Como dice Altucher, “ser honesto en todos los niveles es realmente el hábito más efectivo de todos si quieres tener un gran éxito”.